La manipulación de la energía no es un tema nuevo y es muy común en el mundo oriental, donde los aspectos “material y energético” son considerados como dos aspectos de una misma realidad, las personas involucradas con la técnica o arte de Chi Gong conoce muy bien ésta relación.
Por ello Chi Gong o Qi Gong, se puede comprender a través de su traducción en la que nos referimos como; el trabajo del la energía, ya que Chi = “Energía Vital” y Gong = “Trabajo o Cultivo”, por lo tanto podríamos definir al Chi Gong como: “El cultivo de nuestra energía”, un ejemplo sería; como si nuestro cuerpo fuera un campo de labranza, que debe ser trabajado para ser sembrado y luego así poder cosechar el resultado final, que se traduciría en el reequilibrio o fortalecimiento energético y en el mundo material o físico (nuestro cuerpo), en sanación o salud.
A través del Chi Gong podemos aprender un método o técnica, para lograr acumular y distribuir la energía que nos envuelve, nutre y da vida, la cual para los Chinos es nombrada como “Chi”, lo Hindúes la llaman “Prana” y así en las distintas culturas tiene su propio nombre, pero todas coinciden en que se trata de lo que normalmente en el mundo hispano solemos definir como “La Chispa de la Vida”.
Esa Chispa puede nutrirse o fortalecerse, así como ser direccionada para que sea capaz de recorrer todo nuestro mapa energético, el cual se encuentra delineado por rutas o carreteras en las cuales circula el Chi o la energía vital, que lo chinos han definido como Meridianos, pudiendo éstos obstruirse o bloquearse, llegando a producir lo que llamamos dolor y extendido en el tiempo, enfermedad.
El Chi Gong permite o enfoca el flujo de la energía para poder liberar o desbloquear los meridianos, liberándonos así del dolor y la enfermedad, a través de un trabajo constante, donde la respiración será la encargada de llevar a cabo tan importante tarea.
Su practica se extiende en la actualidad casi exclusivamente a la salud, pero también es utilizada en el ámbito de las artes marciales chinas, para obtener un rendimiento optimo en ellas, considerándose en tal caso como un Chi Gong Marcial, además del ámbito religioso adoptando el nombre por ejemplo Chi Gong Budista, Confucianista, Taoísta. Continuará.
Fuente: Oscar Elias (Prof. de Chi Gong Medico)
