El cáncer de mama posee un enemigo natural y es; la raíz de cúrcuma. El componente especifico que actúa como un poderoso enemigo contra el cáncer y en particular el cáncer de mama es la curcumina, contenida en esta raíz de característico color naranja y con una hermosa flor,
Su origen proviene de la india y es la especia mas popular tanto para su cocina como para la antigua medicina Ayurveda, que la ha utilizado por miles de años en el tratamiento de un gran numero de dolencias, por su
amplia gama de beneficios saludables, entre ellos su capacidad anti cancerígena.
La ciencia occidental desde hace años que vienen estudiando el poder medicinal de esta prodigiosa raíz, los últimos estudios han demostrado su capacidad para ayudar a reducir el riesgo a desarrollar cáncer de mama, en particular entre las mujeres posmenopáusicas que fueron sometidas a una terapia de reemplazo hormonal.
Para comprender mejor el resultado negativo de esta terapia debemos saber que según estudios realizados en el pasado dieron como resultado que la combinación de estrógeno y progestina, utilizada en la terapia de reemplazo hormonal, era responsable un incremento del riesgo entre las mujeres posmenopáusicas a desarrollar tumores de mama, por el exceso o aceleración de la progestina suministrada con la intención de mejorar la sintomatología de la condición posmenopáusica.
Según el nuevo estudio el consumo potencial de curcumina protegería de la acción aceleradora de la progestina, evitando así el desarrollo de tumores mamarios, dijeron los investigadores americanos.
Se observó en animales de laboratorio que la curcumina fue capaz de retrasar o disminuir la incidencia, así como reducir la multiplicidad de los tumores motivada por la progestina. Además la curcumina también impidió la aparición de anomalías en las glándulas mamarias.
Mas puntualmente el equipo de investigación demostró que la progestina acelera el desarrollo de ciertos tumores mediante el aumento de la producción de una molécula llamada V-E-G-F, que favorece el suministro de sangre al tumor, induciendo su crecimiento acelerado. La curcumina ha demostrado ser capaz de inhibir esta molécula.
En resumen los especialistas ante este nuevo descubrimiento plantean la necesidad de probar su uso como agente quimiopreventivo dietético en las mujeres que ya están expuestas a la terapia de reemplazo hormonal con la intención de disminuir o retrasar el riesgo a desarrollar cáncer de mama, en estos casos.
En otras palabras la curcumina evitaría el crecimiento tumoral que requiere de vascularización sanguínea para crecer, así como también actuaría reduciendo las metástasis o proliferación descontrolada del cáncer.
